Pero cómo no te van a robar, imbécil.
Que eres tontoooooooooooooooo.
Ya lo siento pero es que es verdad.
A veces nos queremos hacer los europeos echándole canela al café o quedando con alguien para hacer el brunch, pero es que,
por mucho que queramos,
los españoles somos unos cantamañanas.
El otro día en Londres veía libros para intercambiar en las estaciones de metro y pensaba: ¡Oh! ¡Mira cómo va la gente a llevarse uno dejando otro posteriormente!
Los miraba en plan: ¡Qué cívicos están siendo! ¡Qué educados! ¡Qué bien que no le escupen a los libros!
O sea, como si hubiese visto a Jesucristo. Un milagro, no sé.
Y era gente comportándose normal.
Claro.
Los británicos sí, pero nosotros ni de coña.
Vamos, al segundo día ya no habría libros.
Por eso te digo que, probablemente,
te estén robando.
¡Pero cómo no te van a robar!
Si tienes el bar/cafetería pegado a la recepción y poco control en los accesos.
Que te viene una persona a las 4 de la mañana y te puede mismo hacer el check in o robarte una botella de Ballantines.
Alcohol pa’l body, otra cosa que nos gusta mucho.
Yo creo que deberías empezar a plantearte una mejor distribución del espacio de tu recepción si no quieres que te desaparezcan botellas cada noche.
Hay muchas cosas de las que no sé, pero te aseguro que de recepciones automatizadas controlo bastante.
Aaaaaaaay, dios mío.
Nos va mucho la marcha.